POR PURA AMABILIDAD

Doris Langley Moore.1951

Corría el día 10 de febrero de 1946 y "si al doctor Sandilands, mientras aparcaba en la puerta de la vieja casa parroquial aquel plomizo y deprimente día, le hubieran anticipado que estaba a punto de cometer una imprudencia que no solo afectaría  a su forma de vida, sino que tendría innumerables repercusiones entre marchantes, coleccionistas, conservadores de museo, expertos, críticos y aficionados de toda índole, habría recibido la profecía con sumo escepticismo".

Por pura amabilidad cuenta como actuó el doctor Sandilands aquel día, cuando decidió hacer una visita a una de sus pacientes más pobres, la señora Hovenden, una frágil y conmovedora anciana que, como no tiene con qué pagar las atenciones del doctor, le ofrece un baúl olvidado en su buhardilla que contiene todo un lote de pinturas antiguas y ropa de hogar pasada. Lo que no sabe el doctor, cuando lo acepta a regañadientes, es el caos que desatará en su casa...

Sandilands, un hombre comedido, bondadoso, educado, discreto y generoso, tendrá que pasar por toda una serie de acontecimientos que le harán salir de su pacífica vida: malentendidos, estafas, robos, fraudes, sospechas e investigaciones, darán lugar a toda una serie de situaciones divertidas y entretenidas.

D. L. Moore tiene una prosa cargada de humor, brillante y concisa, en seguida va al grano. Así, la novela se lee con gusto, además de por lo divertida e ingeniosa que resulta. A todo ello se suma el estar versada en arte, lo cual hará las delicias de los que disfruten con esta disciplina.